domingo, agosto 25, 2013

"Si mi biblioteca ardiera esta noche"ª

Si mi biblioteca ardiera esta noche devoraría en minutos lo que a mi me costo diás y noches enteras. Se devoraria como yo lo hice, mis novelas favoritas, quiza sin consideración y sin discriminar como yo lo hice, haría lo propio con los auteres españoles del siglo XVI al XVIII. No releería para comprender los libros de teoría histórica, sencillmente los engulliria en sus llamas sin darle una segunda vista.
Si mi biblioteca ardiera esta noche se perderia entre los libros las notas de amor, odio, sueños, deseos y pensamientos que estan entre las páginas de muchos de mis libros, se perderías las rosas que hay entre ellos, cada una valiosa e ubicada en un libro preciso, en la página correspondiente, pero eso al fuego le daría igual, no se detendría, ni le daría 5 segundos por respeto al recuerdo.
Si mi bibliteca ardiera esta noche se llevaria con ella hojas de papel plagadas de diminutas letras que solas no son nada, pero que en su conjunto en su momento lo fueron todo. Pero hay que tomar en cuenta que el fuego purifica, por que extermina algo para poder volver a comenzar y es entonces que si mi biblioteca ardiera esta noche, yo tendría que volver a comenzar a acumular nuevos libros, nuevas notas, nuevas rosas, nuevas fotos y nuevas anotaciones en los marcos de las pñaginas de los libros y quiza empezaría con ellos una nueva vida.

ª Es el título de un ensayo de  Aldous Huxley.

domingo, agosto 18, 2013

Hay días que me pregunto hasta donde estamos dispuestos a soportar a la gente a nuestro alrededor y como nos mentimos para poder lograrlo.
Hasta que punto la falsa idea que tienen sobre si mismos los otros, los dota de cierta cualidad moral para ofendernos y creer que pueden erigirce como juez y parte sobre todo.

domingo, agosto 11, 2013

Pequeños rasgos de civilización.

En este mes y medio de trabajos forzados, me he dado cuenta que aún sin quererlo y tratandolo de evitar, el gusto por ciertos detalles es lo que nos diferencia e incluso, poniendonos antropológicos, habla de donde hemos crecido y como ha sido nuestra vida.
Ahora mismo tomo té negro en una linda tetera blanca de porcelana y su respectiva jarrita de leche, hay los restos de una pata de jamón serrano  en la mesa de cocina (eso último es casi licencia poética), ya había mencionado antes mi lindisima cafetera italiana y unas copas de cristal soplado color morado, que descansan sobre el mueble de la cocina, que sencillamente son hermosas. Estos son pequeños lujos inconcebibles para algunas personas, por ejemplo las africanas con las que trabajo. Mujeres que tienen varios años viviendo en Francia, unas más que otras, pero que aún guardan ciertas costumbres del Congo, su país de origen.
Me gusta comer bien y si de todos modos voy a gastar, que sea en algo que realmente disfrute, así es que termino comprando agua mineral para la comida, jamón serrano y queso de cabra para la ensalada y queso philadelphia con ajo y especias finas. Estas mujeres prefieren ahorrar y comprar el jamón más barato por comprar zapatos de gucci, bolsos de Prada y perfumes con anuncio publicitarios con diosabequien. Darse un lujo radica en ponerse extensiones de pelo decente (esto merece toda una entrada que ya estoy prepararando) o llevar la peluca a la estética, pero las uñas de sus pies estan llenas de hongos (es verano y usan sandalias de gucci, donde se les ven las uñas) y unas uñas de las manos mal pintadas.
Toman café soluble, por que no les gusta el café de cafetera, es demasiado fuerte para ellas y como olvidar su cara de horror cuando me vieron tomar te negro con limón, dicen que eso es demasiado inglés y me preguntan todo el tiempo que de donde vengo. Al parecer el hecho de que consideren que América Latina es lo mismo de Africa (y eso aquientrenos ofende mi orgullo, que no deja de ser verdad en algun punto) les desconcierta que tenga gustos tan "afrancesados" como tomar café, el gusto por las ensaladas, el jamón de buena calidad y el agua mineral.

viernes, agosto 09, 2013

Satanización de la comida chatarra.

Yo crecí en un mundo con McDonalds, Burguer Kings y KFC, en mi escuela vendían "nutritivas" sopas Maruchan, papitas, frutsis, cheetos y Dios sabe cuanto más.
A la par me criaron en una casa donde se comía sopa, sopa fria, plato fuerte con ensalada y frutas de postre, en la colación y entre comidas había fruta, no por eso no comí comida chatarra, toda mi generación lo hizo. Además de eso, yo practicaba deporte, a nivel profesional es cierto, pero muchos de mi generación lo practicaban jugando futbol en la cancha de la colonia, o a las "traes" con las amigas en la calle, entre otro juegos, que por más que me hagan sentir vieja, si existían en mis épocas de infacia.
Realmente debemos reflexionar sobre las causas de la obesidad infantil y si en gran medida es por culpa de los "alimentos milagro" que solucionan la vida a más de una madre de familia, también es flojera, decidia y negligencia por parte de los padres no darles a sus hijos una alimentación balanceada, sana e inculcarles el ejercicio físico.
Aquí en París hay McDonals, KFC y sandwish grec y no por eso tiene sobrepeso, en el supermercado hay papitas, montón de vino y cerveza y eso no los hace tener problemas de niños obesos, quiza aqui las madres todavía se preocupan por dar a sus hijos una educación culinaria más sana.
Francamente estoy realmente harta de las campañas contra la comida chatarra, el punto es muy sencillo, lleva decadas existiendo y el problema es mucho más actual, es que le ritmo de vida  y algunos hablan de la entrada al mercado laboral de las mujeres ha provocado cambios en la alimentación (sobre esto ultimo tengo mis dudas, la mujer en el campo laboral lleva años en este lado del mundo, básicamente desde que todos los hombres se les desaparecieron para ir a jugar con sus juguetitos de fuegos en la primera y después en la segunda guerra mundial). La verdad es que la campaña es contra los padres que cada día se involucran menos en la educación de los hijos, estan tan ocupados tratando de ser "cool" para poder ser "compa" de sus hijos, que se olvidan que eso no es posible, no en una relación sana de padres e hijos.