viernes, febrero 15, 2008

horoscopo y dietas

Yo nunca he sido muy creyente del horoscopo, aunque siempre he reconocido que como parte de un todo. No podemos negar estar conectados de alguna manera con el mundo exterior.
Es así cuando uno pasa la edad en la que tiene mayor propensión a enfermedades como bulimia o anorexia sana y salva, pues su complexión es más bien delgada y fan de la comida solo tiene un punto débil: las dietas blandas.
Siempre que en la mañana siente un dolor raro proviniente de la boca del estomago, o más abajo en la parte izquierda y empieza a temer por su colón o peor aun una visita al detestado dentista ya sabe las especificaciones que dira ese grandioso personaje que es su doctor, el cual dicho sea de paso, le hace descuento de estudiante.
Dieta blanda, que consiste en nada de irritantes, nada de comida grasosa, con demaciados condimentos, demanciada sal, demaciado picante, demaciado artiicial. Y más tarda en salir de ahí que en empezar a pensar en chicarrones con salsa, papas con queso derretido y finos cuadritos de tocino, jugosos cortes de carne, fast food, y paletas con chile o mangos con chile y limón.
Tal pareciera que el párrafo de un principio no tenia concordancia con todo lo demás, pero es que justo después de la sentencia de dieta blanda, se oye la voz de mi señora madre diciendo: recuerda que eres virgo y tu punto débil es el estomago, si ya lo sabes, no se por que no te cuidas.
Y quiza tenga razón, por que ni la gripa me da tanto como dolores de estomago

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