Ayer por la noche, después del largo día pase por un café antes de llegar definitivamente a mi casa y fue en la fila de ahí donde sucedio la siguiente escena:
Tipo raro (TR).- Hola
Yo.- (ojos de extrañeza) Hola?
TR.- mira que casualidad venir a encontrarnos aqui, como has estado?
Yo.- si?-si yo vengo mínimo dos veces por semana- bien gracias, y tú? (por supuesto yo empezaba a recordar una a una las fiestas donde podría haber conocido al tipo)
TR.- sigues molesta conmigo después de tanto tiempo? Yo creí que ya lo habías superado.
Yo.- aaaaaaaaaaah, permiteme -ordenaba yo muy linda- un momento.
TR.- No, no, dejalo yo invito por el gusto de encontrarte, además de cuando acá tan educada?
Yo.- gracias, pero no es necesario. Además me ofendes, yo siempre he sido educada... bueno por lo general.
-Ya con las bebidas en mano-
Yo.- Bueeeeeeeeeeeno, gracias. Me tengo que ir...
TR.- No te puedes quedar, me gustaria platicar contigo del por que terminamos.
Yo.- Quéeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee?????????????? tu y yo????????
TR.- no te enfades, igual se que ya no importa.
Yo.- pero en la vida yo he andado contigo - y de eso estaba totalmente segura- sinceramente ni recuerdo quien eres.
TR.- sigues enfadada.
Yo.- nooooooooo, en serio no se quien eres. Creo que mejor me voy, pero gracias por el café.
TR.- Susana deja de ser infantil
Yo.- Su...qué? uy jajajajajajajajajaja te confundes de persona yo no me llamo así.
TR.- No???? uy perdón....
-después de contarme tooooooooda la historia de su vieja relación con Susana, a la cual no veía desde hacia 5 años-
TR.- Bueno, gracias necesitaba cerrar eso y creo que lo he hecho
Yo.- me alegro, pero en verdad, en verdad me tengo que ir. Te agradecería el café pero me costo sesión de terapia, así que creo que dire que quedamos a mano :P
A veces es más fácil contar las cosas a un total y completo desconocido que a alguien que vemos todos los días, yo solo estaba muy feliz por que encontré mi medallita, aunque irónicamente su pérdida estaba cargada de simbolismos.
Es decir, yo me la puse por una razón, es decir, la dote de un significado en particular que involucraba la fe, la ausencia y la esperanza y una vez que todo eso había llegado a buen puerto, sencillamente decidio extraviarse por el mundo. Pero que al final le gusta estar colgadita de mi mano derecha, por supuesto le cambie de listón por uno muy mono y checo cada 5 min. que siga en el lugar donde la dejé.
Total que esto gira y gira y nos encontramos las cosas más bizarras donde creiamos que perdiamos otras, por ejemplo el tiempo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario